Camino a la Perdicion

Hay que dar las gracias a Dios de que exista el Gran Casino Aranjuez porque sin este gigante de mesas de poker no podría hablar, después de cada visita, de un hecho insólito, nuevo e, incluso diría que, inquietante. Aranjuez da para mucho y no comprendo muy bien por que muchos de los grandes aficionados a este loable arte del poker, representa poco mas que el infierno... quizá sean sus Sit&Go hiperturbo, su gente desaliñada y en poco menos que chandal, o sus crupiers demonizados... el tema es que un servidor, con la cuenta atrás ya para su despedida de las noches de poker, lo visita con asiduidad, y no deja de sentir que allí, entre esas mesas y alfombras, gitanos y borrachos, caballeros y "damas", esta la mas pura esencia del poker... la mal llamada "suerte".

Para no demorarme mas con filosofía barata y demagogia me centraré en lo acontecido ayer mismo. Era una noche especial, estaba en el ambiente. Pese al sueño y la hora las mesas estaban medio llenas (o medio vacías XD) y el tiempo de espera era escaso. Últimamente las mesas de poker de Aranjuez no son lo que eran, en lo que concierne a afluencia, aunque eso es otra historia ;) . Empecé la noche con claros signos de que era mejor abandonar la "cueva" pero no hice caso alguno a las "señales".

En esta primera tanda salí de la mesa 7º. El "agresor" ligaba, ligaba, y ligaba. No cartas, a él le daba igual ir con 56o, 47o o AK, era indiferente. Cuando uno es tocado por "el dedo acusador de Dios" nadie se le puede poner por delante. Así pues eliminó el solito a casi la mitad de la mesa... yo entre ellos. Aún yendo por delante de él las cartas eran sus aliadas y contra ello no se puede jugar. En una mano, por ejemplo, que vi desde detrás de la barrera (ya eliminado), el "iluminado" vio cartas hasta el river con 46o pagando en cada calle para que en el turn y en el river saliesen sendos 4 y 6 y le diesen el bote... no había razón para quedarse en él; ni proyectos de color, ni de escalera, ni nada. Incluso las manos que no iba reconocía que se había tirado de cartas que había en el board!! (soy testigo de ello).

Con la sensación de sufrir una broma pesada me dirigí, evitando a este jugador, a otra de las mesas. Dios aprieta pero no ahoga y me volvía a avisar de que huyese de allí, que salvase mi alma impura y volviese en otro momento porque el "virus" se había propagado por toda la sala. No le hice caso, ni aún cuando, sentado a la mesa, con el crupier con las cartas extendidas en abanico, vi el siguiente milagro.

Un jugador en frente mío mira las cartas sobre el tapete y dice. Sobra ese As. Cómo podía ser?? se había producido el milagro de los "panes y los peces"? Mi ojos no se lo creían pero era cierto, no solo el As si no que también el Ac estaba duplicado entre las cartas de la baraja!! una baraja con 6 ASES!!!! Dios me había avisado, tenía que levantarme de la mesa y huir, salir chillando como un demonio exorcizado... pero la silla y las fichas de mi manos pesaron mas y volví a no hacer caso... y así pasó (el "jefe de sala" solo comentó a ello: "entonces hay otra baraja que le faltarán" XD).

El "elegido" esta vez se descubrió pronto. Las cartas le llovían en sus manos y no había nada que hacer. En menos de media hora salí de sus garras tras perder mi última ficha y me resigné dispuesto a romper el cerco de tanto "angel divino" en la sala. No sabía que luchar contra corriente es sinónimo de dejarte hasta la camisa.

Tercera mesa. En la primera mano ya se descubre el "sobrino de Dios" y apalea sin piedad. Lleve lo que lleve gana el bote, echa a los jugadores. Yo lloro en silencio y cuando veo 66o meto la caja. Él dice que me regala un bote majo y se apunta... lleva Q2o. En el FLOP 2s, TURN Qc, RIVER carta blanca. A la calle. Como sus otros "hermanos" infiltrados queda en premios, el primero. Es su noche aunque ya son demasiados los que así lo hacen ver al resto por las malas.

Última mesa. Tengo, deseo, luchar contra la fuerza invisible que me impide hacer nada... me siento a la mesa de "los perdedores" que lloramos juntos tanto "divino" suelto en el casino; creemos que reuniéndonos podremos urdir el plan de la venganza contra ellos y resarcirnos mientras uno de estos "seres" nos vigila (ha ganado 3 mesas de sit y 3000€ en la ruleta). Por suerte no se sienta con nosotros. Respiramos tranquilos solo los primeros 15 minutos. Hay uno de ellos entre nosotros. Se acabó la noche.

Igualmente que sus "hermanos" utiliza sus poderes para eliminar jugadores, coger mas y mas fichas, robar botes y ganar SIEMPRE con "any two". A mi mano llegan mis dos avatares para esta guerra; 56s (corazones). 3 jugadores. Él nos vigila tras sus cartas.

FLOP: 5d 4h 8h

Meto mis últimas fichas para derribarle... es la última bala. Él ve. Enseña Escalera FLOPEADA. Yo proyecto de color y segunda pareja.

Esta claro, la batalla se ha perdido... no hay ayuda para los herejes.

Finalmente salgo de la "cueva" y huyo, tan rápido como puedo, para evitar que estos "vampiros de las fichas" se enteren de mi ausencia pero ellos están en otros menesteres. Hay demasiado ganado dispuesto a regalarles su carne como para malgastar la noche con un pobre diablo...